Es común considerar la huída como un acto de cobardes.
Varios dichos lo confirman: "Mas vale aquí corrió..."; "emprendió la graciosa huida"; o "No huyas, ¡cobarde!".
Los sinónimos lo reafirman: fugarse, evadir, desertar, escabullir. Me remiten, casi de forma natural, a fugarse de la cárcel, evadir la responsabilidad, desertar de la escuela, o escabullirse por una rendija. En cualquier caso no son verbos que uno quiera escuchar de sí mismo.
Supongamos ahora que el verbo aplica para alguien que se marchó de su país. Huyó de su patria. Dejando a su familia, a sus hijos, a su amada... Es un cobarde.
Yo vivo con un cobarde. Un cobarde que huyó de su patria, dejó su familia, su hijo, su amada.
Ayer me dijo: "Huí de la guerra. Era inaceptable matar a los míos"
Huir me ha parecido, hoy, el acto más valiente.
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5 comments:
Huir del amor es ser un cobarde, huir por amor es ser valiente........
quien escribió semejante cursilería?
yo no.
b.
Pus al menos fírmenle, pa saber. jajaja
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